Contar con los líderes adecuados es uno de los factores clave para establecer y poner en marcha estructuras de colaboración. Un liderazgo eficaz puede facilitar el trabajo conjunto de aliados de diversos sectores, enmarcar la visión de la iniciativa en términos que resuenen entre los aliados, mediar en los conflictos y aportar conocimientos técnicos. Las cuestiones de liderazgo, como la falta de capacidad de gestión, suelen crear más problemas para una iniciativa que las cuestiones técnicas. El éxito de las alianzas de intercambio de datos puede depender del liderazgo institucional de la iniciativa. El funcionamiento de una iniciativa de puesta en común de datos puede mejorar enormemente si cuenta con un propietario institucional con los recursos y el liderazgo adecuados.
Pero identificar y obtener el apoyo de las personas adecuadas para formar una alianza suele ser todo un reto. Dada la sensibilidad con la que las organizaciones protegen sus datos, junto con los costes adicionales de la puesta en común de datos en términos de inversión en personal y financiación, puede ser difícil conseguir la aceptación de las organizaciones. Comprender la motivación y la resistencia de las partes interesadas a compartir datos es fundamental, ya que a menudo requiere un cambio cultural en la mentalidad de los altos cargos.
Además de la resistencia al riesgo basada en los entornos políticos que se ha analizado en la sección anterior, la resistencia de las partes interesadas puede variar en función de sus características y su papel en la alianza. El ejemplo de InBloom expuesto en la sección anterior demuestra el poder que tiene el público a la hora de expresar su resistencia a la puesta en común de datos cuando no se tienen en cuenta sus preocupaciones en materia de privacidad y seguridad. En muchas iniciativas multipartitas de intercambio de datos, entre los amplios grupos de partes interesadas se incluyen organismos públicos que pretenden acceder a los datos para la elaboración de políticas, la producción de estadísticas o la orientación de programas centrados en el bien social, y empresas que poseen datos sobre el público, lo que hace que el público sea también un grupo de partes interesadas clave.
Comprender la resistencia de cada grupo de interesados en una iniciativa de intercambio de datos y los riesgos a los que se enfrentan al participar en la alianza es el primer paso para involucrar a los posibles responsables. Por ejemplo, el siguiente cuadro enumera algunas de las posibles motivaciones y preocupaciones que podrían diferir entre los grupos de interesados en una situación en la que un organismo público pretende acceder a datos de titularidad privada.
Grupo de partes interesadas | Motivación | Preocupaciones |
---|---|---|
Empresas privadas | Intentan monetizar los datos | Riesgos para la reputación, costes financieros, protección de los datos de clientes/consumidores y pérdida potencial de ingresos por compartir datos, incluso si los competidores acceden a secretos comerciales. |
Entidades públicas | Acceso y utilización de datos privados | Riesgos para la reputación, preocupación por la sostenibilidad de estos esfuerzos en comparación con el nivel de trabajo requerido, recursos limitados para acceder a los datos, procesarlos y analizarlos. |
El público | Trata de compartir los beneficios de los usos de los datos y la tecnología | Pérdida de privacidad, uso indebido de datos, falta de transparencia en torno a las decisiones sobre datos, desconfianza en los responsables de la toma de decisiones sobre datos en los sectores público y privado, preocupaciones por la seguridad. |