La puesta en común de datos por parte de distintos aliados y la agregación de diferentes fuentes de datos en plataformas comunes exigen importantes inversiones en términos de interoperabilidad y formato de los datos. Los datos son interoperables cuando siguen estándares técnicas comúnmente acordadas y tienen metadatos suficientes para que un analista pueda identificar la procedencia, los conceptos, los métodos y las orientaciones de uso. 

Tanto los estándares como los metadatos son necesarios para la interoperabilidad. Sin estándares, incluso los datos bien descritos (es decir, con metadatos) no están listos para el usuario y, sin metadatos, lleva muchísimo tiempo entender los datos o ponerlos en uso.

Incluso dentro de una misma iniciativa, los distintos tipos de datos pueden requerir diferentes enfoques de normalización e interoperabilidad. Por ejemplo, la California Data Collaborative recibe dos tipos de datos: de facturación y de participación en programas. Los primeros requieren poca normalización, ya que el formato de facturación es uniforme en todas las agencias. Sin embargo, los formatos de los segundos pueden variar. Por ello, la CaDC ha desarrollado un programa informático que las agencias asociadas pueden utilizar para normalizar los datos de participación antes de compartirlos.

Aunque a menudo se hace mucho hincapié en los estándares, es importante reconocer que las iniciativas de éxito invierten mucho en la producción de metadatos de alta calidad. Unos buenos metadatos pueden facilitar el proceso de transferencia y uso de los datos. Para orientar a los proveedores de datos, el Intercambio de Datos Humanitarios ha elaborado y puesto a disposición instrucciones claras sobre los campos de recursos y metadatos que se requieren, y ofrece apoyo a los nuevos aliados para aplicarlas.

Garantizar la interoperabilidad entre conjuntos de datos dispares

Cualquier organización humanitaria puede cargar sus datos en el Intercambio de Datos Humanitarios. Para garantizar que el intercambio de datos en la plataforma sea fluido, HDX admite contribuciones en cualquier formato de datos estándar. Sin embargo, desde el principio, HDX ha reconocido que era necesaria cierta estandarización para reducir la fricción a la hora de compartir datos. 

Su enfoque original de normalización de datos requería tiempo y conocimientos técnicos por parte de las organizaciones humanitarias contribuyentes. Pero, en 2014, HDX reinició este enfoque para desarrollar el Lenguaje de Intercambio Humanitario (HXL). Dado que la mayoría de los datos de la HDX se almacenaban en hojas de cálculo, el nuevo enfoque solo requería que los datos incluyeran un identificador (un símbolo utilizando un hashtag) en el título de la columna, lo que hacía posible fusionar los mismos campos en múltiples conjuntos de datos. Aunque la adopción de HXL sigue planteando problemas, los estudios realizados por la iniciativa de intercambio de datos demuestran que ha mejorado enormemente el uso de los datos y ha ahorrado tiempo de procesamiento.